Que el 2022 sea …
como un árbol que nos dé sombra y alimento.
Y nos permita tener unas buenas raíces que nos sujeten.
Como la palabra gasa, que nos acune y nos cure las heridas.
Como una barca grande, que atraviese el mar de las ausencias y del dolor, sin permitirnos hundirnos del todo.
Que nos lleve a la otra orilla de la pena sin perdernos a la deriva.
Que sea como un pájaro azul, que bata con sus alas el acordeón del viento, y su vuelo sea libre y feliz.
Como una niña, que sepa asombrarse y reír y jugar con los ojos bien abiertos.
Como un libro abierto, que nos permita crecer de piel adentro.
Que sea como una canción que con su música acalle el sonido terrible de este miedo pandémico.
Y nos permita abrazarnos y nos traiga de nuevo las caricias y los juegos.
Que sea ese suspiro con el que poder echar de menos a los que no están.
Como una caja que, al abrirla, nos traiga la sorpresa eterna del comienzo.
Como una vida limpia, nueva, dulce y recién nacida, sin miedo ni dolor, todavía.
Que el 2022 sea…
0 comentarios