¿Te gusta leer? ¿Quieres que los pequeños aprendan y crezcan leyendo? A continuación os damos 5 consejos para fomentar la lectura en los niños y niñas que tengamos cerca. Son pequeñas recomendaciones generales que se pueden llevar a cabo sin muchas dificultades y que acabarán consiguiendo que amen los libros.
1. Leer en voz alta
Una de las actividades más eficaces (y más hermosas) para fomentar la lectura en casa es compartir la lectura. No hay nada más satisfactorio como que otra persona nos lea en voz alta la historia en la que estamos sumergidos. ¿Puede haber algo más fascinante que escuchar en voz de tu madre cómo el personaje va sorteando todo tipo de peligros, se enfrenta a sus propios miedos y resuelve las dificultades? O tener que parar la lectura porque las atropelladas risas no nos dejan continuar en un pasaje realmente divertido. O cómo ralentizamos la lectura mientras los pequeños se tapan los ojos o los oídos porque es un pasaje terrible. Estas vivencias hacen de la lectura una experiencia más atractiva y entrañable.
La lectura siempre ha de ser placentera y nada mejor que provocar momentos de lectura en voz alta que permitan a los niños relajarse y sentarse simplemente a escuchar. Sin más. ¿Probamos? Esto es bueno para fomentar la lectura.
2. Visitar librerías (o bibliotecas)
Otra actividad para fomentar la lectura en casa es la visita a las librerías o bibliotecas. Es importante que, desde muy pequeños, reconozcan que hay establecimientos que se dedican a venderte o prestarte libros para tu disfrute personal. Así como llevamos a nuestros hijos al mercado, a la panadería o a la zapatería, ir a comprar libros (o pedirlos prestados) debería formar parte de nuestras salidas habituales.
Es interesante informarse de qué librerías de nuestro barrio o ciudad tienen un buen fondo de literatura infantil o son especializadas en el género. Las encargadas de las librerías especializadas nos pueden guiar en nuestra búsqueda para encontrar grandes joyas y fomentar la lectura. Os recomendamos que os dejéis aconsejar, suelen ser personas grandes conocedoras de los clásicos LIJ y de las mejores últimas novedades y saben distinguir los libros más adecuados de las modas pasajeras.
La visita a la librería nos permitirá conocer nuevos autores, valorar algunos libros al tenerlos en nuestros manos y, sobre todo, ir desarrollando un gusto crítico sobre las lecturas. Obviamente también servirá para fomentar la lectura, potenciar el hábito lector y conocer (en función de la edad de nuestro hijo/a) el proceso de producción de un libro.
3. Escuchar a los abuelos y abuelas
El verano es un momento ideal para compartir tiempo con nuestros mayores. Los abuelos y abuelas siempre tienen una historia que contar sobre un montón de situaciones y anécdotas que han experimentado a lo largo de su vida. No hay que desaprovechar la situación de este tiempo compartido con nuestros abuelos para que les cuenten situaciones vividas durante su infancia (sean alegres o dramáticas), que compartan con nuestros hijos sus juegos y diversiones de la infancia o, lo que es mejor, retahílas, trabalenguas o adivinanzas. Son un auténtico tesoro de la literatura de tradición oral que ayudará a fomentar la lectura. Relatos, historias o fórmulas lingüísticas difíciles de encontrar en las publicaciones actuales.
En muchas bibliotecas públicas se ha extendido la actividad de las Bibliotecas Vivas (o Bibliotecas Humanas), en la que los usuarios se reúnen con otras personas para conocer sus historias de vida o relatos en primera persona.
4. Ir al teatro
Dentro de estos consejos para fomentar la lectura, otra actividad para promocionar la literatura infantil y animar a leer es asistir a algún espectáculo de títeres o teatro infantil. Durante el verano podemos encontrar algunos espectáculos de calle que favorecen el interés por los cuentos y las historias.
Asistir regularmente al teatro (no sólo cuando nos llevan los profesores) incrementa el hábito de acercarse a la literatura (sea oral, narrada o teatralizada) y a las historias que nos interpelan. Ver teatro es otra manera de leer y fomentar la lectura.
No siempre es fácil seleccionar qué tipo de montajes son los más interesantes. Muchas veces podemos encontrarnos con productos comerciales que siguen un esquema muy parecido a las estrategias televisivas que sólo buscan el entretenimiento superfluo y anodino. Es recomendable acudir a guías o expertos que nos aconsejen sobre qué tipo de teatro poder ver (o incluso leer).
Recomendamos el artículo “El teatro infantil no enseña nada” de Jesús Ge en este mismo blog.
5. Hablar sobre libros
Otra opción para fomentar la lectura entre los más pequeños, así como para afianzar el hábito lector y que éste se convierta en algo relevante para los niños y las niñas, es importante que dediquemos un rato a hablar sobre los libros, a comentarlos con ellos. Aunque hay que advertir que la intención no es comprobar si lo han leído ni siquiera si lo han entendido, sino qué les ha gustado, inquietado o sorprendido. Así como comentamos una película o una obra de teatro con un amigo y nos paramos a clarificar y expresar nuestras sensaciones ante lo que acabamos de disfrutar. De esta manera hemos de enfrentar la conversación sobre las lecturas con nuestros pequeños. No de una manera fiscalizadora sino como una conversación natural sobre la experiencia.
Pueden ser válidas preguntas sobre qué les ha llamado la atención, si se imaginaban otro final, qué sintieron en determinado pasaje o si han vivido alguna situación similar a la que el libro cuenta. Los libros suelen ser buenos canalizadores para la conversación pero existe el riesgo de convertirlos en una especie de catecismo que hay que seguir a rajatabla. Hay familias que utilizan los libros para modificar determinadas conductas (libros tipo “Pippo se quita el pañal”) y creemos que este es un uso erróneo de la literatura. La literatura infantil, al igual que la de adultos, ha de ser emancipadora y desafiante.
Hablar de nuestros libros
Otra conversación que ayuda a confirmar los libros como lugares de ocio y diversión es compartir con los pequeños los libros que estamos leyendo los adultos. Explicarles que hemos comprado este libro, que nos ha gustado (o no), que nos lo ha regalado tal persona… en definitiva, que vean que los libros forman parte natural de la vida de los adultos (en el caso de que así sea, claro).
Esperamos que estos consejos os sirvan de ayuda para fomentar la lectura entre los más pequeños y conseguir que adoren coger un libro y disfrutar leyendo. Y si quieres seguir investigando y formándote con nosotros, no te pierdas nuestros cursos online.
Muy buenos consejos para fomentar la lectura en los pequeñitos, la verdad desde que se cancelaron las clases en las escuelas por la situación actual, mi sobrina ha aprovechado para leer novelas y cómics que le habíamos regalado y puedo decir que le gusta mucho leer.
sería genial que compartieran algún artículo con recomendaciones de lecturas infantiles, que hayan salido este año. ¿Se animan? ¡Un gran saludo!
Muchas gracias, Aventuras Infantiles.
Cada trimestre elaboramos, en colaboración con el Col·legi de Bibliotecaris de la Comunitat Valenciana, un boletín de recomendaciones para las bibliotecas organizadas por edades y con algunas actividades y propuestas creativas. Suelen reflejar muchas de las novedades del mercado para ayudar a las bibliotecarias a elegir sus adquisiciones.
En breve, presentaremos en redes el próximo número.
Las otras ediciones las puedes encontrar en la página web del Col·legi (www.cobdcv.es)
Un saludo.