Una mirada antropológica sobre la primera comunicación con los bebés.
LA TEORÍA DE LA COMUNICACIÓN Y EL LENGUAJE CORPORAL
¿Cómo nos comunicamos con los bebés? Algunas teorías señalan que la experiencia más cercana al primer sistema de comunicación de nuestra especie hace aproximadamente 1,8 millones años, es la forma en la que hablamos y nos comunicamos con los bebés. A través de mímica y señales crearon un sistema de comunicación compuesto de variadas señales holísticas, pero este lenguaje corporal se perdió durante nuestra evolución.
LA FASE SENSORIOMOTORA
En las fases sensoriomotora de Piaget (desde los cero a los dos-tres años) comienza la primera comunicación que tiene muchos puntos en común con las bases de toda comunicación humana.
SONIDOS Y GESTOS
Con el sistema limitado de mensajes que utilizaron el Homo Ergaster y el Homo Neardental, compuesto de unos pocos sonidos y gestos, podían avisar de un peligro, saludar, amenazar, tranquilizar… nosotras hablamos con los bebés para que se muevan, para que sonrían, les cantamos para que duerman, para apaciguarlos… sin darnos cuenta adoptamos un modo musical y exageramos notablemente estos rasgos de comunicación a los qué los bebés responden porque tienen la capacidad precoz de diferenciar y procesar estos rasgos, diferenciando entre algunos de ellos, como el tiempo, la frecuencia o las pausas.
COMUNICACIÓN PREVERBAL
Según Papoušek, durante el periodo de comunicación preverbal se “incluyen interacciones recíprocas entre las predisposiciones genéticas y la experiencia, entre la maduración neuromotora y la práctica, entre la percepción y la producción vocal y, en particular, entre un bebé que aprende y un adulto docente”
RITMO Y MUSICALIDAD
La musicalidad comunicativa es propia de nuestra especie, además, es un sistema con poca o ninguna variación cultural que estaría entre algunas de las habilidades que desarrollamos para poder simpatizar o fraternizar con otros grupos. Los recursos poéticos que utiliza la madre para comunicarse con el bebé no se utilizan en lo cotidiano, estos serían parte de un remanente del primer sistema de comunicación de nuestra especie. Aquí puedes leer un artículo relacionado “Los bebés y la poesía infantil” de Mar Benegas
LIBROS QUE ACOMPAÑAN
Los libros musicales son un modelo que nos puede servir de mucha utilidad en este contexto, consiguen estimular esta interacción y el desarrollo lingüístico en el bebé.
Estas melodías ritmico-poeticas atraen a los bebés que nos responden cuando cambiamos la intensidad o el tono, responden a las rimas y las mamás los utilizan también para regular su estado.
EL APEGO Y LA PALABRA
De la misma forma se desarrolla el apego de manera natural, el bebé requiere del contacto, la voz, la mirada y la cercanía de la madre que le genera un vínculo de seguridad. Esto como parte de la comunicación lo vemos en las escenas cotidianas, en el día a día con el bebé. De forma amorosa se va creando el vínculo que fortalece este apego, y que la mayoría de las veces va acompañada también de la musicalidad y la poesía,
Los libros rimados son un estímulo que pueden acompañar durante el desarrollo del bebé, permiten interactuar y fortalecer este vínculo, por ejemplo, jugando con las rimas para que ellos terminen la frase:
Al tomarlos en brazos
“Mamá Osa
es como un abrazo.
Mi mamá
me lleva en sus…”
Al vestirlos
“Debajo de Mamá Rana
una bufanda de…”
Al ir a dormir
“Mamá Pata y sus patitos.
Ella los cuida y los cuenta,
y los perfuma con menta.
Y también será su cuna,
tan dulce como la…”
Toda la comunicación que los padres o cuidadores establecen con el bebé le ayudará a que construya su propia comprensión del mundo y las etapas en su desarrollo. Como afirma Piaget, reflejan cómo se desarrolla su pensamiento lógico y sus habilidades para razonar.
Amparo Benegas
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